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Prevención de enfermedades crónicas: ¿cómo los hábitos alimenticios desde la infancia pueden marcar la diferencia

El País

La prevención de enfermedades crónicas no transmisibles comienza desde la infancia, donde los hábitos alimenticios saludables juegan un papel clave. Una alimentación equilibrada y la adquisición de buenos hábitos desde edades tempranas pueden reducir el riesgo de desarrollar enfermedades como la diabetes, la hipertensión y la obesidad en la adultez. Es fundamental fomentar una dieta rica en frutas, verduras y granos integrales para promover un estilo de vida saludable desde el inicio. Al hacerlo, podemos prevenir enfermedades crónicas y mejorar nuestra calidad de vida a largo plazo, lo que subraya la importancia de la nutrición y la educación para la salud en las primeras etapas de la vida.